En primera instancia unos dientes mal posicionados
representan un problema estético. En casos muy graves la persona se puede
llegar a sentir avergonzada y hasta evitar sonreír y mostrar su dentadura. Pero
¿los dientes torcidos son un problema estético o un problema de salud ?
Los dientes torcidos afectan al 78% de la población adulta.
Tener dientes torcidos hace que el cepillado y el hilo dental sean muy
difíciles, a veces imposibles. Como resultado, las bacterias y la placa se
quedan en las áreas de hacinamiento, y esas bacterias secretan toxinas que
conducirán a la pérdida de encías y huesos que rodean los dientes, haciéndolos
aflojarse con el tiempo y eventualmente perder los dientes.
Las mismas bacterias que están atrapadas entre sus dientes
apretados y torcidos pueden invadir sus vasos sanguíneos, lo que puede causar
daño a las células que alinean sus arterias coronarias, aumentando su riesgo de
enfermedades del corazón, apoplejía, diabetes y otras enfermedades sistémicas.
El cuerpo sano va de la mano con la boca sana.
La corrección de los dientes torcidos hará más fácil la
eliminación de la placa bacteriana y de las bacterias, reduciendo así el número
de bacterias que quedarán atrapadas en las encías, reduciendo también la
cantidad de bacterias que invaden sus arterias coronarias, lo que reducirá el
riesgo de desarrollar enfermedad del corazón, accidente cerebrovascular y otras
enfermedades, o mejorar las condiciones existentes.
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